“si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.” 2 Cronicas 7:14
La poblacion Cristiana en Estados Unidos está enfrentado en carne propia una realidad que hasta hace unos años solo era un tema de conversacion: La legalizacion del matrimonio del mismo sexo. Hoy en dia, esto en una ley aprovada que beneficia al 1.8 % de la poblacion Estado Unidense pero que esta afectando a todo ciudadano. La campana de “celebracion” esta tomando forma de comerciales de television, en libros para niños, en las carteleras que se ven en las carreteras y en otras diversas maneras.
El mensaje que mas frequentemente se escucha es que “El presidente se tiene que arrepentir”, que “Los Estados Unidos de America se tiene que humillar ante Dios” etc. Comentarios que condenan al que ya esta condenado. Pero, que sanara nuestra tierra? Que puede hacer la diferencia? En 2 de Cronicas 7:14 Dios nos da las instrucciones: “SI SE HUMILLARE MI PUEBLO SOBRE EL CUAL MI NOMBRE ES INVOCADO” El Señor nos dice que los que tienen que humillarse, arrepentirse y buscar su rostro es SU PUEBLO.
Todo Cristiano, en toda nacion, obedezcamos al mandato de Dios, busquemos su rostro, tomemos responsabilidad por los pecados que hay en nuestras vidas, la fornicacion, la falta de perdon, el robo, la falta de fe, el desorden, etc. Agrada a Dios con una vida de Santidad, y Dios hara su parte: El SANARA NUESTRA TIERRA.