Como te preparas para una gran celebración?

Por Jenny Lopez Lowe

La mayor parte de nuestras vidas la vivimos en espacios de preparación. En la niñez, nos preparamos académicamenta para la universidad, y en la universidad nos preparamos para una carrera. Consecutivamente vivimos en preparacion para proyectos pequeños y grandes; desde una pequeña cena familiar, hasta grandes eventos como bodas, o graduaciones. En medio de todo caemos en el creer que la mayor importancia está en llenar las expectativas de un gran evento. Eso nos lleva a esforzarnos en detalles que pondrán un toque distinto a nuestra celebración. Todo esto es bueno, pero en realidad que es lo mas importante?

La mayor satisfacción siempre estará en el carácter que mantenemos durante las preparaciones. En qué manera interactuamos con aquellos que nos asisten en las preparaciones? Es igual como trataremos a los invitados que disfrutarán de nuestra fiesta?  Recordemos el pasaje donde Marta, una mujer de Betania invita al Señor Jesús a su casa. Este pasaje es muy conocido, especialmente porque se le dá enfoque al contraste entre las dos hermanas. Hoy veamos lo siguiente: Marta, al igual que la mayoría de los anfitriones a fiestas y reuniones, estaba enfocada en preparar un espacio de reunión, Lucas el autor del libro, no pone ningún enfoque en el resultado de las preparaciones. El pasaje termina con las palabras de Jesus, respondiendo a Marta su pregunta. Lucas no describe si después hubo cena, ni siquiera menciona lo que bebieron durante su visita. En hecho, el decide que su narración de este evento termina allí. La importancia del pasaje no estaba en lo que era importante para la anfitriona, el enfoque estaba en la calidad de vida, en el carácter de la persona durante el espacio de la preparación.

“Mientras iba de camino con sus discípulos, Jesús entró en una aldea, y una mujer llamada Marta lo recibió en su casa. Tenía ella una hermana llamada María que, sentada a los pies del Señor, escuchaba lo que él decía. Marta, por su parte, se sentía abrumada porque tenía mucho que hacer. Así que se acercó a él y le dijo: —Señor, ¿no te importa que mi hermana me haya dejado sirviendo sola? ¡Dile que me ayude! —Marta, Marta —le contestó Jesús—, estás inquieta y preocupada por muchas cosas, pero solo una es necesaria. María ha escogido la mejor, y nadie se la quitará.” Lucas 10:38-42

Amada amiga, se nos acercan días de especiales celebraciones, donde pasaremos horas y horas esforzandonos en preparar nuestros hogares, iglesias, o negocios para reuniones especiales. Recuerda que la calidad de nuestro viaje determina la satisfacción de nuestro destino.

El apostol Pablo lo dice de esta manera:

“Así que, yo de esta manera corro, no como a la ventura; de esta manera peleo, no como quien golpea el aire, sino que golpeo mi cuerpo, y lo pongo en servidumbre, no sea que habiendo sido heraldo para otros, yo mismo venga a ser eliminado. I Corintios 9:26-27

Mientras nos preparamos para las festividades, tengamos la meta de disfrutar a los demás, tanto en las preparaciones como en la celebración. Nuestras formas y métodos importan, allanan el camino hacia la sanidad, el amor y los resultados extraordinarios.

OREMOS: Padre gracias por los motivos de celebración, gracias por las ideas y recursos para estas preparaciones, pero sobretodo gracias por aquellos que están a mi alrededor. Ayudame a amarlos, apreciarlos y agradecerles por todo lo que hacen. Amen.