La Hormiga nos enseña …..

 

pexels-photo-207954.jpeg Anda a ver a la hormiga, perezoso, fíjate en lo que hace y aprende la lección”   Proverbios 6:6

Tamerlan (Conquistador-lider militar Turco) contaba con frecuencia a sus amigos la siguiente anécdota: “Una vez me ví obligado a guarecerme en un edificio arruinado huyendo de mis enemigos y allí permanecí sentado durante horas. Deseando desviar mi mente de mi condición desesperada, fije mi vista en una hormiga que intentaba subir por una pared llevando un trozo de trigo mayor que ella.

Observé los esfuerzos que realizó para conseguir lo que deseaba. El grano cayó a tierra sesenta y nueve veces; pero el insecto perseveró y por fin a la setenta vez pudo llegar a lo alto. Esto me alentó grandemente en aquellos momentos y jamás he olvidado la lección”.

Una pequeña hormiga puede convertirse en un gran maestro para mostrarnos la lección de la perseverancia, la confianza en si misma y la dedicación. Cuando nuestros ojos pueden mirar con detenimiento estos pequeños animalitos veremos que a pesar de ser tan pequeño su constancia en llevar algo hasta su cueva es impresionante.

Creo que hoy debo aprender de ella y saber que Dios también espera que yo sea perseverante, constante y esforzado. Su misma palabra nos lo dice que aprendamos de la hormiga las lección al respecto. Sé que muchas veces he dejado de perseverar en la oración porque la respuesta no llega, he dejado de perseverar en el amor, porque no soy correspondido. He dejado de perseverar en la humildad porque cada día me rodean más los orgullosos.

El lema de David Livistgntone (Misionero,  medico Británico) fue: “Me propuse no parar jamás hasta llegar al fin y ver terminado mi cometido”.

Hoy creo que debiera ser también mi lema. Son muchas las veces que he comenzado con entusiasmo cosas para luego dejarlas a un lado sin terminar. Son muchos los obstáculos que puedo encontrar en el camino, pero lo más importante no son los obstáculos, sino los desafíos que encuentro en mi camino para saltar esos obstáculos.

Cada obstáculo debe convertirse para mi en un desafío. La respuesta siempre la encontraré en Dios.  Proverbios 10:4 Pobre es el que trabaja con mano negligente, mas la mano de los diligentes enriquece.

Señor. De todo lo creado por tu mano, yo puedo aprender. Cada cosa, cada animal y aún cada circunstancia tiene algo que me puede guiar en el proceso de tu aprendizaje.

Hoy quiero aprender de la hormiga. Conoces mi inconstancia y falta de perseverancia. Yo hoy quiero caminar firme y sólidamente en tu sendero. Ayúdame a ser perseverante y constante y caminar con fidelidad delante de ti. Amén

¡¡ESTARAS PRESENTE HOY….EN TODO LO QUE HAGA!!

Mi vida es tuya Oh DiosTen presente al Señor en todo lo que hagas, y él te llevará por el camino recto” Proverbios 3:6.

Hoy podrías tener presente muchas cosas, pero creo que lo más importante es tener presente al Señor tu Dios.  Muchos hijos de Dios se han ejercitado profundamente en el asunto de ser guiados y dirigidos por El.  Cada uno de ellos puede dar testimonio de la belleza de tener presente al Dios Altísimo en todo lo que se hace, porque definitivamente El nos llevará por el camino recto.

El hijo de Dios que desea tener presente al Señor en todo lo que hace es aquel  que busca conocer la voluntad de Dios, va al libro sagrado para encontrar dirección y refresca su confianza por mirar como Dios lo ha guiado a través de los tiempos y en cada circunstancia.

Sabemos que Abraham dejó su tierra y su parentela y empezó a caminar sin otra guía que la dirección del Señor y marchó por un desierto seco sin saber a donde iba, pero con la confianza total en el Señor.  Por cuarenta años los israelitas caminaron por el desierto con la dirección absoluta del Señor.  Sabemos que Josué entró a la tierra prometida y atravesó las dificultades y venció a los enemigos bajo la dirección del Señor.

Leemos en la Biblia como los apóstoles marcharon a través de las dificultades,  las persecuciones, solo con la dirección completa del Señor.  Hoy quiero encomendar mi camino a él, porque se que él enderezará mis veredas. La Biblia promete que el   Señor me guiará si yo lo tengo presente a él.  El  dice en su Palabra Yo te enseñaré y te instruiré acerca del camino que debes andar.  El Señor me guiará continuamente si pongo en él mi confianza.  El dijo: Yo soy la luz del mundo, el que me sigue no andará en tinieblas. Esta palabra promete que su luz me alumbrará.

Cuando ponemos nuestra esperanza en el Señor, una nueva fuerza llega hasta nosotros y las sombras de las dudas se disipan.  Hoy es un día para tener presente al Señor en todos mis caminos y poder caminar con seguridad y confianza.  Por muchos años estuve perdido sin ninguna luz.  Por muchos años  no tuve presente al Señor en mis planes y senderos, pero ahora , la luz ha llegado a mi corazón y se el secreto de vivir en la confianza de poner todos los planes en las manos del Señor.

Señor, Gracias por ser mi luz y mi Salvación.   Hoy quiero andar en confianza delante de ti y poner toda mi vida en tus manos.  Señor, quiero tenerte presente en todos mis caminos y se que tu enderezarás mis veredas.  Gracias porque en ti he podido confiar y gracias por la fortaleza que me impartes en la vida diaria.  Gracias por tu amor y por ser mi guía perfecto en medio de mis caminos imperfectos. Amén.

Esfuerzate, se Valiente!!!

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By Tania Cardona

Mira que te mando que te esfuerces  y seas  valiente; no temas ni desmayes. Porque Yahweh tu Dios estará contigo  en dondequiera que vayas” Josué 1:7 

Muchas veces a lo largo de nuestras vidas, cuando estamos mas cerca de la bendición que Dios tiene para nosotros, somos victimas del desanimo y olvidamos que Dios prometió no desampararnos nunca. A propósito, la únicas personas que se desaniman son aquellas que luchan por algo grande. El desanimo rara vez toca al corazón de la gente sin visión y sin metas, siendo el arma del enemigo para aquellos que saben lo que quieren.

En el libro de Josue, cuando el pueblo de Israel se preparaba para la conquista de Canaan, y entrar en la tierra prometida, Dios le promete a Josuè que nunca lo desamparará y requiere de él de dos virtudes indispensables, el esfuerzo y la valentía. Dios no ha cambiado hoy y requiere que sus hijos nos mantengamos en pie de lucha frente a las adversidades.

Esforzarse significa continuar hacia delante, es un paso más, la milla extra que debemos caminar antes de la victoria final. La gente que triunfa nunca mira atrás. La diferencia entre lo ordinario y lo extraordinario es el esfuerzo extra. Los hombres y mujeres de éxito son aquellos que hacen las cosas que la gente ordinaria no desea hacer.

Ser valiente no significa  ausencia de temor, todos los hombres hemos sentido miedo en algún momento. El valor es la capacidad para continuar a pesar de los temores. La mejor manera de ser valiente es enfrentar lo que tememos. Es mejor hacer las cosas con miedo que no hacerlas porque tememos. Dios no nos ha dado el espíritu de cobardía, sino de poder, amor, y dominio propio.

No desmayes. Desmayar significa perder las fuerzas. Es muy fácil desmayar cuando hacemos las cosas con nuestro brazo de carne. La mejor manera de evitar desmayar es hacer las cosas a la manera de Dios y en el tiempo de Dios.

“El da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas. Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen; pero los que esperan a Yahweh tendrán nuevas fuerzas: levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán y no se fatigarán.” Isaías 40:29-31

Esfuérzate, se valiente y no desmayes. No le permitas al desanimo cortar en dos los grandes planes que Dios tiene con tu vida. El Señor ha prometido estar contigo para librarte. Los grandes propósitos conllevan a grandes batallas, las grandes batallas terminan en grandes victorias, y las grandes victorias cimentan  nuestra fe a mayor profundidad. Cuando el desanimo toca a tu puerta simplemente no respondas, no le abras, y no le des entrada. Déjalo afuera de tu corazón.

“Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones, por tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida, y se traspasen los montes al corazón del mar; aunque bramen y se turben sus aguas, y tiemblen los montes a causa de su braveza.” Salmos 46:2

Nadie puede hacer por ti, lo que tú mismo debes hacer.

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Por Tania Cardona

Sabes que cuando Dios te creo el dijo: “Hagamos al ser humano a nuestra imagen y semejanza” Génesis 1:26 (NVI) Dios depositó en ti Su espíritu y ese espíritu es ganador.

¿Tiene usted miedo al éxito o al fracaso?
¿Se ha preguntado alguna vez por qué no logra lo que se propone?

De seguro se lo ha preguntado y lo mas seguro es que no vuelva a intentarlo.
Definamos Miedo al Éxito: 
Temor a terminar con alguna dependencia, hacia algo o hacia alguién.

La palabra éxito está asociada a salir, lograr, terminar y acabar con la dependencia de cualquier cosa. Por ejemplo muchos tienen miedo a salir de la pobreza, o tienen miedo a terminar una relación donde es abusada o maltratada por temor a quedarse sola, y así muchos tienen miedo al futuro no llegando a dar los pasos que tienen que dar esperando que las condiciones estén perfectas, es allí lo que se definiría como miedo al fracaso.
¿Quién quiere fracasar? De seguro ninguno, todos queremos tener éxito. A veces en la vida para tener éxito debemos darnos el permiso de fracasar. Del fracaso podemos sacar varias enseñanzas pero la primordial es esta: aprendemos como no hacerlo de esa forma.
Usted debe saber que el invento de la bombilla eléctrica se lo debemos a Thomas A. Edison, porque él nos “dio” la luz, él consiguió que tuviéramos luz en todas partes, que pudiéramos ver este mensaje por Internet … y porque en su vida no perdió ni un solo segundo para inventar la lámpara que nos proporciona iluminación artificial. Fracasó 2000 veces y él dijo “yo no he fracasado ni una sola vez, solamente ha sido un proyecto de 2000 pasos”.
Quiero ayudarle haciendo algunas preguntas:
* ¿Puede ver claramente qué es lo que impide que usted no logre lo que se propone?
* ¿De verdad desea lograrlo?
* ¿Puede imaginar como sería una vez logrado?
* ¿Qué harías si no tuvieras miedo?
Es un tiempo para reflexionar y quisiera hacerle una pregunta que es de suma importancia, pues la pregunta que naturalmente le sigue es: ¿Cómo se sentiría una vez que logre sus metas o alcance sus sueños? Te toca a ti ver como sería tu vida si alcanzaras tus metas.
Sabía usted que una de las razones por las cuales no alcanzamos nuestros sueños es el sabotaje que nos hacemos nosotros mismos.
Algunas personas dicen querer triunfar en la vida y tener éxito, pero al mismo tiempo vemos como sabotean sus propios proyectos de muchas maneras, por medio de la postergación, no tener tiempo o no tener los recursos, en fin se crean limites, los limites están en tu mente.

Otras personas comienzan a dar los pasos y cuando las cosas no salen como ellos quieren escuchamos la famosa frase: “lo importante es que lo intenté” y se quedan allí. El intentarlo no basta, necesitas cambiar tu actitud ante la vida, es tiempo de que te comprometas con tus sueños, que puedas generarlos.
Tienes todo lo que puedas necesitar: tienes a Dios, tienes la vida, tienes dones, talentos, experiencias, belleza y sobre todo las ganas de salir adelante, no te sabotees a ti mismo, no rechazes la oportunidad que tienes de aprender.

El hecho de que fracases no significas que eres un fracasado. El fracaso no es tu identidad, tu verdadera identidad es que tú eres quien Dios dice que eres, eres creado por Dios para cosas grandes.
Te invito a soltar tus miedos: el miedo a crecer, el miedo a cambiar, el miedo a la inseguridad, el miedo a la soledad, el miedo a la envidia, el miedo al que dirán, el miedo a lograr, el miedo a perder, tantos miedos te han dejado paralizado. El llamado que hoy te hago es que puedas apropiarte de esta palabra:
Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.

2 Timoteo 1:7 (LBLA)
Recuerda lo siguiente: nada ganas con lamentarte, nada ganas con quejarte, nada ganas con decir no soy capaz, no puedo, no tengo, pobrecito yo, la vida ha sido cruel conmigo, nadie me ama, nada ganas con ser victima, nada absolutamente ganas con ese tipo de pensamiento derrotista. Cambia tus pensamientos, conviértelos en victoria, empieza por ver tus fortalezas y tus dones, tus habilidades, ¿Cuáles son las experiencias que has tenido? ¿Cómo usarás esas experiencias para alcanzar tus sueños? ¿En qué eres bueno o buena?
Lo que Dios te ha dado es para que lo uses, para que vivas bien y puedas ayudar a otros a vivir la vida al máximo.
Señor, enséñanos a soltar los miedos y a ver todo lo que tu puedes hacer en mi vida Amén.

Tengo un Proposito para ti vida

Por Faviola  Calix

De un lapiz he aprendido que:
1. Siempre hara cosas extraordinarias solo si se deja sostener en la mano de alguien mas.
2. Cuando te saquen punta experimentaras dolor, pero sera nesesario para que seas cada dia mejor.
3. Tendras errores , pero tendras un borrador para corregirlos todos.
4. La parte mas importante de ti es la que llevas dentro.
5. En donde seas usado tendras que dejar tu marca. No importa las condiciones o circustancias deberas seguir escribiendo.
Si nos dejamos sostener de la mano de Dios seremos utiles en su reino. JUAN 15:5 dice que si estamos con Dios grandes frutos recogeremos pero alejados de el nada podemos hacer, ROMANOS 8:37 nos dice que somos mas que vencedores y lo confirma JOSUE 1:5 cuando Jehova le habla a Josue y le dice: ” nadie te podrá hacer frente en todos los dias de tu vida; como estuve con Moises estaré contigo, no ye dejare ni te desamparare.

Experimentamos dolor en muchas ocasiones, luchas, tribulaciones, pero sera nesesario para llevarnos a un nivel mayor de su gloria ROMANOS 8:28 nos dice que en enmedio de las tribulaciones debemos esforzarnos y ser valientes no importa la circunstancia porque el reino de los cielos lo arrebatan los valientes

Tendremos errores, debemos tener humildad para corregirlos. COLOSENSES 3:2 dice que debemos de vestirnos de Misericordia, benignidad, humildad, mansedumbre, paciencia como escogidos por Dios.

Y lo mas importante lo que llevamos dentro. PROVERBIOS 4:23 nos dice sobre toda cosa guadada, guarda tu corazón.

Donde estemos tendremos que dejar siempre nuestra marca.
FILIPENSES 3:14 prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesus.
Sin importar las ciscunstancias, condiciones, pruebas, debemos seguir hacia adelante, sabiendo que en Cristo tenemos la Victoria.

El Peso de Gloria cuando confías en Dios

Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día. Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria; no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas”. II Corintios 4:16-18
En esta porción el Apóstol Pablo nos enseña a tener la actitud debida hacia la tribulación. El nos enseña una filosofía nueva hacia el dolor. Únicamente un creyente puede adoptar esta filosofía porque se basa en la esperanza que tenemos de tener un futuro glorioso. Si usted no es un hijo de Dios, no hay ninguna consolación que podemos darle cuando está en tribulación.
Como creyentes, debemos tener “los ojos puestos en Jesús, el autor y consumidor de la fe”. (Hebreos 12:2) Así tenemos la confianza de que lo que sucede no es por la casualidad. Hay un todo sabio Dios que está detrás de todo. Él sabe lo que está haciendo. En Romanos 8:28 Pablo dijo: “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados”.
En esta porción Pablo nos anima a tomar en cuenta que la tribulación es leve. Es una consolación saber que no es con toda intensidad. Nos conviene mirar el lado positivo. Siempre se puede encontrar algo positivo. Cuando no nos queda ninguna solución terrenal podemos levantar la vista al nivel celestial y encontrar consolación. Allá “no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor, porque las primeras cosas pasaron.” (Apocalipsis 21:4) Siempre hay los que tienden a exagerar la gravedad de su tribulación. Así suena más dramática. Tal vez están buscando atención y consolación de los demás.
También él dice que es momentánea. Quizás es para hoy y mañana, no más, pero si es para todo el resto de tu vida, ¿qué es esto a comparación con la eternidad? Una vez en mi niñez pisé un clavo y acabé con una infección en mi pie. En el momento, parecía como un largo lapso de tiempo que andaba rengo. No debe haber sido más que dos o tres días o una semana a lo máximo. Así son las tribulaciones. Son pasajeras. Ten paciencia. Tendrán su fin.
Debemos saber que la tribulación produce en nosotros algo benéfico. La palabra “tribulación” significa presión. Es algo que pone peso sobe nosotros. Por eso, decimos que es algo que tenemos que llevar. Pablo dice que es “leve” pero, a su vez es un peso. Es algo que sentimos.
Por regla general tomamos la tribulación como una adversidad, pero Pablo dice que debemos tomarla como una ventaja. Es algo que añade al esplendor y honor que tendremos en nuestro hogar celestial. Lo más penoso es nuestro andar en la tierra, tanto más gloriosa será nuestra entrada en la gloria.
El Apóstol Pablo era ingenuo en armar palabras para expresar la grandeza de algo. Él llama nuestro estado celestial “una cada vez más excelente y eterno peso de gloria”. Nos conviene detenernos por un rato largo analizando todo lo que está incluido en estas palabras. Mi tribulación presente se achica y casi desvanece en comparación con lo que me espera más allá.
Él dice que es cada vez más excelente. Cada vez que analizamos nuestra herencia encontramos valores que miramos por alto la primera vez. Es una maravilla lo que Dios incorporó en la creación de la tierra para que sirva para nuestra necesidad. Sin embargo, con todo, siempre hay necesidades y angustias. Cuando llegamos a los cielos vamos a darnos cuenta de que Dios ha provisto para cada comodidad y necesidad. No habrá falta de nada. Además, él dice que será eterna. No habrá falta ni fin de lo que Dios tiene planeado por nosotros allá. Aquí en la tierra el hombre exterior (o sea el cuerpo) se va gastando y no hay seguridad de la permanencia de nuestras comodidades.
Pablo dice que es un peso de gloria. Es algo que tiene sustancia. Dios no nos engaña con sueños fantásticos que se revientan como un globo.
Si damos atención a nuestra vida espiritual, nuestro hombre interior se renueva de día en día. Si el hombre interior es débil, será muy difícil aguantar las tribulaciones. Es por eso que es tan importante que estemos fortalecidos espiritualmente. Así tendremos fuerza para enfrentarnos con tribulaciones. Así seremos capaces de levantar la vista a las cosas de arriba donde está Jesús, el autor y consumidor de nuestra fe. No seas más un creyente débil que se desmaya y se rinde, vencido cada vez que te enfrentas con una adversidad en tu vida.