Juan 4: 28-29, 39
28: Entonces la mujer dejó su cántaro, y fue a la ciudad, y dijo a los hombres:
29: Venid, ved a un hombre que me ha dicho todo cuanto he hecho. ? No será este el Cristo? Entonces salieron de la ciudad, y vinieron a él.
39 Y muchos de los samaritanos de aquella ciudad creyeron en él por la palabra de la mujer, que daba testimonio diciendo: Me dijo todo lo que he hecho.
40 Entonces vinieron los samaritanos a él y le rogaron que se quedase con ellos; y se quedó allí dos días.
41 Y creyeron muchos más por la palabra de él,
42 y decían a la mujer: Ya no creemos solamente por tu dicho, porque nosotros mismos hemos oído, y sabemos que verdaderamente éste es el Salvador del mundo, el Cristo.
Se dice que las mujeres hablamos mucho mas que los hombres y si la verdad que así es no hay duda de eso, pero que hermoso cuando las palabras que salen de nuestras bocas no son solo palabrerias sin sentido, sino palabras que son capaces de transformar la vida de otras personas. Pero para llegar a ese nivel es necesario que nos despojemos de muchas cosas, la mujer Samaritana de despojó de:
Su Egoísmo: Cuando Jesús le pidió agua dijo que Judíos y Samaritanos no se trataban entre si Juan: 4:8; esta claro que no tenia intenciones de darle de beber aún sabiendo que él tenia sed, y cuando Jesús le dice que él tiene agua ella le pide que le dé de esa agua porque ya no queria estar yendo a traer agua al pozo, vemos que solo estaba pensando en ella. Juan 4: 9-15; Sin embargo según avanza la conversación ella se interesa mucho en lo que él le estaba diciendo.
Su Ignorancia: Vosotros adoráis lo que no sabeís; Juan 4: 22a. La mujer samaritana hizo muy bien en preguntarle a Jesús sobre donde se tenia que adorar y con la respuesta de Jesús, se dio cuenta que ella estaba equivocada. Muchas veces somos orgullosas y no permitimos que nos corrigan, queremos hacer las cosas como nosotras decimos aunque estemos equivacadas. Esta mujer salió de su ignorancia porque tuvo la humildad al reconocer que no sabía realmente en lo que creía.
Su Cántaro: Ella dejó su cántaro y fue a contar a la gente de la ciudad lo que Jesús le había dicho. Es hermoso ya que este cántaro puede representar el afán que como mujeres tenemos en nuestra casa, en el trabajo, y muchas cosas que muchas veces no nos traen nada de provecho para nuestra vida espiritual. Esta mujer no dudó en ir a compartir su testimonio lo hizo inmediatamente que terminara de hablar con Jesús no se detuvo a pensar en que tal vez mañana u otro día , no, lo hizo lo mas rapido que pudo. Y por su testimonio se convirtieron muchas personas.
No podemos callar todas las cosas maravillosas que Dios a hecho en nuestras vidas, empezando por nuestra salvación y luego todo aquellas situaciones de nuestro diario vivir que parecieran tan simples pero en cuales Dios tambien se manifiesta.
Nunca minimicemos la intervensión de Dios en nuestra vida, si no mas bien engrandezcamos los cuidados que él tiene de nosotras, compartamos el mensaje de amor y como está mujer salvaremos a muchos que estan perdidos.
No importa cuales sean tus circunstancias, Dios es especialista en cambiarlas, él cambió la vida de esta mujer de una forma extraordinaria bastó con que hablara con él y le escuchara. Su vida estaba desordenada pero Jesús la ordenó y puede hacer lo mismo contigo, solamente debes creer como lo hizo ella, y Jesús transformará tu vida para siempre.
Querido Dios te pido que nos ayudes a hablar con palabras que edifiquen a otros, con palabras que aumenten la fé de las personas en Dios, ayudamos a cumplir la gran comisión en el nombre de Jesús, Amén.