Loida Medina
Versículo Bíblico: Josué 1:8
Muchas veces nosotras las mujeres ponemos primero la vista en la necesidad que podamos tener a lo inmediato, y con esas acciones o actitudes podemos desobedecer lo que Dios nos dice en su palabra de meditar en su palabra de día y de noche. Es por eso que nos manda hacerlo porque las necesidades, los problemas, los retos, los anhelos son situaciones de nuestro diario vivir. Y la respuesta está en Dios, en meditar y buscar la respuesta en El.
La vanidad en nosotras las mujeres puede afectarnos el servir a Dios y ser Victoriosas, Adam y Eva se enfrascaron en buscar alimentar su ego más que obedecer a Dios, eso termino en su muerte espiritual. Las mujeres como sobre protectoras que somos por naturaleza al no tener a lo inmediato la comida del día, queremos actuar en nuestras propias fuerzas, Esaú es ejemplo de ellos, nuestra fe y obediencia no podemos venderla por la necesidad que estemos pasando. Nuestro Señor Jesucristo fue tentado a causa del hambre pero el conocimiento de la palabra de Dios lo mantuvo en obediencia dándole la victoria inmediata, pues no solo de pan vivirá el hombre sino de toda palabra de Dios.
Cada una de nosotras las mujeres en especial podemos entregar la actitud de Esaú que llevamos dentro, sea cual sea y que nos pueda hacer que nuestro camino no prospere. Es por eso que la pronta respuesta a cada necesidad está en Dios, en meditar en su palabra, en orar para que todo lo emprendamos sea bendecido y prosperado por Dios. Por lo que es importante hacer un compromiso con Dios de no dejar de buscar en su Palabra la guía para nuestra vida, para que nuestro servicio en la obra y que sea de bendición y de prosperidad para nuestras vidas y para los que servimos en nuestro llamado.
Oración:
Señor Jesús moldéame, y ayúdame a poder obedecer a tu palabra, y al plan perfecto que tienes para mí, sólo ayúdame a poder enteder y comprender tu propóosito, porque sé que por medio de la obediencia tu te lo glorificas, porque independientemente la circunstancia que esté pasando, mi mirada siempre debe apuntar hacia tu plan.
Bendiciones