ELABORADO POR : Glenda Ruiz

Fecha:  5 mayo 2018

Números 27:1—11, Números 36:1—12

Las hijas de Zelofehad, una  historia en la Biblia que relata la muerte de un padre que no tenía hijo varón, cinco mujeres eran sus hijas y ellas no podían heredar de su padre en ese tiempo. Pero ellas fueron mujeres sin temores y  resueltas a reclamar lo suyo, aún cuando era contrario a la Ley antigua. Y dijeron a Moisés, al sacerdote y toda la Asamblea: ¿Por qué ha de desaparecer el nombre de nuestro padre de entre su familia sólo por que no tuvo hijo? Dennos Herencia entre los hermanos de nuestro padre. El caso excepcional lo presentó Moisés ante el Señor. Y el Señor dijo: las hijas de Zelofehad tienen razón en lo que dicen.  Ciertamente les darás herencia y pasarás a ellas la herencia de su padre.

Estas mujeres nos dan un ejemplo de valor, estima, resolución, conquista,  libres de prejuicios, lo cual debemos las mujeres adoptar ante muchas injusticias que todavía en estos tiempos ocurren contra las mujeres y sus derechos. Esta historia se asemeja a mi historia familiar, donde cinco hijas mujeres, a criterio de mi padre no teníamos derecho a ser mujeres profesionales; según su posición sólo los hombres debían ir al colegio y la Universidad. En el área rural de nuestro país aún se dan estos patrones de negar derechos legítimos a la mujer como lo es de obtener títulos profesionales. Se nos cierran oportunidades para asumir  posiciones gerenciales importantes en empresas; y aún en las congregaciones es visto de menos el liderazgo de la mujer.

Mujer, el Señor ratificó la petición de aquellas cinco mujeres, diciendo: Si tienen derechos para que vivan una vida digna.

Tenemos derecho a educación y prepararnos como profesionales.

Tenemos capacidad para ocupar lugares importantes en la sociedad, la Iglesia, los negocios propios o heredados.

Muchas veces lo que necesitamos es quitarnos las vestiduras de baja autoestima, temores, pensamientos de fracaso, orgullo y  otros, para tomar el lugar al cual Dios nos predestinó desde antes de la Fundación del mundo, como dice la Biblia. Llenemonos de grandes resoluciones del corazón para pelear espiritualmente y conquistar  todo lo que se nos ha negado por el hecho de ser mujer.

ORACIÓN

Padre celestial hoy te presentamos a todas las mujeres del planeta tierra, dándote gracias por habernos creado con todas las cualidades especiales para que tu propósito se cumpla en cada una de nosotras. Fortalecenos para ser mujeres valientes y guiar a las mujeres jóvenes a caminar en la senda de victoria.

Elaborado por: Glenda Ruíz

Salmo 68:11-12, Exodo 15:19-21, Jueces 5:28-30

Este Salmo establece que El Señor ha dado la palabra; las mujeres que anuncian las buenas nuevas son gran multitud: Los Reyes de los ejércitos huyen; si huyen, y la que se queda en casa repartirá el botín.

Miriam, hermana de Moisés y Aarón, profetiza, salió con las mujeres de Israel  con sus panderos y danzas a celebrar la derrota del ejércitos Egipcio y decían en sus cantos: canten al Señor porque ha triunfado gloriosamente, al caballo y su jinete ha arrojado al mar.

La madre de Sísara capitán del Ejército de Jabín Rey de Canaán, desde su casa con sus princesas, declaraba victoria y reparto del botín, creyendo victoria del enemigo del pueblo de Israel.

En la actualidad, las congregaciones de las iglesias en su gran mayoría la conforman las mujeres, apasionadas por Cristo, fortalecidas en el poder de su espíritu, llenas de gratitud en sus corazones que nos llevan a  ir tras el llamado fundamental de los hijos de Dios, sin desmayar y con compromiso. Entonces, tomaremos estas actitudes que tuvieron estas mujeres y así se cumplirá lo escrito en el salmo 68:11-12.

• Anunciaremos las buenas nuevas
• Levantarnos multitud de mujeres
• Celebraremos las victorias
• Repartiremos el botín

ORACIÓN

Gracias Señor porque tu no haces acepción de personas y nosotras las mujeres tenemos un lugar especial en tu corazón y tus planes. Espíritu Santo, haz de nosotros unas mujeres esforzadas y valientes, sabias en gran manera, con corazón compasivo y llenos de gratitud a nuestro Dios. Bendecimos en el nombre de Jesús a todas las mujeres del planeta tierra declaramos que son anunciadoras de buenas nuevas. Amén.

Elaborado por: Glenda Ruiz 

2 Samuel 6:16-23

La historia que se relata en esta porción bíblica es acerca del Rey David y su esposa Mical, donde ella tuvo una actitud negativa y palabras de reproche y desprecio hacia su esposo el Rey, cuando lo observó desde su casa, como el Rey se manifestaba en júbilo y danza ante el Arca de Jehová que estaba siendo recibida en Jerusalén.

La vida diaria de nuestras relaciones, especialmente con el esposo está sometida continuamente a desencuentros, malentendidos, puntos de vistas diferentes, egoísmo, luchas, entre otras, que se pueden volver una batalla campal de continuo si no lo abordamos guiados por el Espíritu Santo y sometiendo nuestro yo.

Esta mujer Mical muestra una actitud negativa y contraria al carácter de una mujer del reino, al expresar palabras que representaron desprecio en su corazón hacia su esposo, cuando dijo: ¡como se ha distinguido hoy el Rey de Israel! Se descubrió hoy ante los ojos de las criadas de sus siervos, como se descubriría sin decoro un insensato.

El Rey David, después de festejar con el pueblo y de bendecirlos, regresaba a su casa para bendecirla y se encontró con el desprecio de su esposa. Yo me pregunto. ¿porque esta esposa no acompañaba a su esposo en esta celebración?. ¿No estaba ella en el mismo sentir de su esposo? ¿ Le reprochaba y dejaba ver su molestia que ahora él fuera el Rey de Israel y no su padre?.

Cómo mujeres del reino nuestras actitudes deben mostrar una respuesta diferente a la de esta mujer, cuando nos enfrentamos a distintas situaciones o diferencias con nuestro esposo. Podemos seguir manteniendo nuestra propia opinión o posición pero dirigirnos a nuestro esposo con respeto, con humildad para dar a conocer nuestra opinión. Pues no se trata de tensar la cuerda ante las opiniones  diferentes sino aprender a consensuar o aceptar una opinión o posición diferente para el bien de construir relaciones saludables y edificar un ambiente de amor y cordialidad en nuestra casa.

ORACIÓN

Señor, ante ti nos presentamos como tus hijas, para orar por todas las mujeres que luchan por mantener relaciones cordiales, de respeto y amor con su esposo. Te pedimos que las acerques a ti para que sea tu amor en ellas las que las guíen para edificar relaciones sanas en su entorno familiar.

Espíritu Santo trae dominio propio sobre las mujeres para que nuestras relaciones sean conforme a tu voluntad. Amén.

ELABORADO POR : Glenda Ruiz

Fecha:  5 mayo 2018

Números 27:1—11, Números 36:1—12

Las hijas de Zelofehad, una  historia en la Biblia que relata la muerte de un padre que no tenía hijo varón, cinco mujeres eran sus hijas y ellas no podían heredar de su padre en ese tiempo. Pero ellas fueron mujeres sin temores y  resueltas a reclamar lo suyo, aún cuando era contrario a la Ley antigua. Y dijeron a Moisés, al sacerdote y toda la Asamblea: ¿Por qué ha de desaparecer el nombre de nuestro padre de entre su familia sólo por que no tuvo hijo? Dennos Herencia entre los hermanos de nuestro padre. El caso excepcional lo presentó Moisés ante el Señor. Y el Señor dijo: las hijas de Zelofehad tienen razón en lo que dicen.  Ciertamente les darás herencia y pasarás a ellas la herencia de su padre.

Estas mujeres nos dan un ejemplo de valor, estima, resolución, conquista,  libres de prejuicios, lo cual debemos las mujeres adoptar ante muchas injusticias que todavía en estos tiempos ocurren contra las mujeres y sus derechos. Esta historia se asemeja a mi historia familiar, donde cinco hijas mujeres, a criterio de mi padre no teníamos derecho a ser mujeres profesionales; según su posición sólo los hombres debían ir al colegio y la Universidad. En el área rural de nuestro país aún se dan estos patrones de negar derechos legítimos a la mujer como lo es de obtener títulos profesionales. Se nos cierran oportunidades para asumir  posiciones gerenciales importantes en empresas; y aún en las congregaciones es visto de menos el liderazgo de la mujer.

Mujer, el Señor ratificó la petición de aquellas cinco mujeres, diciendo: Si tienen derechos para que vivan una vida digna.

Tenemos derecho a educación y prepararnos como profesionales.

Tenemos capacidad para ocupar lugares importantes en la sociedad, la Iglesia, los negocios propios o heredados.

Muchas veces lo que necesitamos es quitarnos las vestiduras de baja autoestima, temores, pensamientos de fracaso, orgullo y  otros, para tomar el lugar al cual Dios nos predestinó desde antes de la Fundación del mundo, como dice la Biblia. Llenemonos de grandes resoluciones del corazón para pelear espiritualmente y conquistar  todo lo que se nos ha negado por el hecho de ser mujer.

ORACIÓN

Padre celestial hoy te presentamos a todas las mujeres del planeta tierra, dándote gracias por habernos creado con todas las cualidades especiales para que tu propósito se cumpla en cada una de nosotras. Fortalecenos para ser mujeres valientes y guiar a las mujeres jóvenes a caminar en la senda de victoria.

Elaborado por: Glenda Ruiz

2 Reyes 4:8-17

La Sunamita descrita en este pasaje de la Biblia es una mujer con varias cualidades: Mujer distinguida, perseverante, hospitalaria, ayuda idónea de su esposo para transmitirle visión espiritual, mujer de planes y proyectos que los desarrolla en familia con la aprobación de su esposo.

Dios usa todos estos atributos puestos en acción por  la mujer Sunamita en favor de su reino y de su nombre, para traer prosperidad integral a la vida de esta mujer pues ella aún no tenía hijos. Los ojos del criado del varón de Dios fueron abiertos para que viera la necesidad de la Sunamita, pues el dijo: No tiene ningún hijo y su marido es viejo.

Dios preparó en su plan y propósito de toda mujer que procreáramos,  así que, si hay alguna mujer con problema de esterilidad, a ti te digo: Dios obrara tu milagro. Aquí en esta porción bíblica tienes un modelo del reino para recibir prosperidad de forma integral.

Las mujeres del reino, somos mujeres de visión y acción. No recibimos un no de la ciencia y los médicos,  por respuesta. Tu puedes creer y ponerte en acción en contribuir a edificar el reino de Dios aquí en la tierra y el Señor se presentará a ti y te dirá: ¿Qué quieres que yo haga por ti?

Hay muchas mujeres a nuestro alrededor que son mujeres de visión y acción, que nos inspiran para avanzar y conquistar. Sigamos sus huellas y desarrollemos los dones que Dios nos ha dado. ¿Qué Dones recibiste de Dios y los guardasteis? Ponlos al servicio de tu creador.

ORACIÓN
Padre celestial, te amamos y te bendecidos. Eres bueno y para siempre tu misericordia. Danos ayuda a todas las mujeres de tu reino para convertirnos en mujeres de visión y acción. Completa tu obra en cada una de tus hijas y conviértenos en mujeres esforzadas y valientes. Amén

Por Glenda Ruíz

Números 31:15

Deuteronomio 20:14

El botín es algo de mucho valor que en la guerra no se debía destruir. ¿Y porque razón Dios nos consideró como botín de guerra según su palabra?. El botín está formado por las provisiones,  el armamento y las pertenencias que un ejército vencedor se apodera del bando derrotado.

Como botín de guerra somos consagradas a Dios según 1 Crónicas 26:27 para reparar la casa de Jehová, fortalecer y consolidar la obra de Dios. La mujer de Dios es un recurso de mucho valor que Él usa para mantener el esplendor de su casa. Las mujeres somos un recurso que El se provee a través de las batallas espirituales y la victoria en Cristo. Esto es un principio que encontramos en la palabra de Dios. Ana, Ester, Rut, Débora y muchas mujeres más de las cuales se escribe en la Biblia trajeron esplendor a la casa de Dios, como tu y yo también, cuando entregamos nuestra vida a Cristo.

Las iglesias hoy en día se constituyen en su membresía mayormente de mujeres, pues somos el botín de Cristo, recibidas en la Cruz del calvario. No somos cualquier cosa y tampoco estamos preservadas para destrucción, sino para fortalecer la obra de Dios y glorificar su nombre.

Me encanta conocer que el esplendor de nuestro Dios y su obra, es uno de los propósitos de pertenecer a una congregación, el cuerpo de Cristo. También duele en el corazón conocer que en estos tiempos, existen todavía, iglesias y denominaciones donde la mujer no es integrada al cuerpo de Cristo como lo que es según la Biblia, un tesoro en las manos de Dios, sino que, se le ponen límites sobre lo que puede y lo que  no puede hacer. Pero en Cristo todo lo podemos, pues Él nos dio un lugar en la casa del padre y nos fortalece cada día.

ORACIÓN
Amado Dios, gracias por amarnos a las mujeres y llamarnos a tomar un lugar especial en el cuerpo de Cristo. Gracias porque tu no haces acepción de personas. Te pedimos Señor que nos enseñes acerca de nuestra posición en Cristo y que vivamos conforme al valor que tu nos das como mujeres.